Qué ganas de nieve más grandes tenemos muchos de nosotros ya. El invierno está aquí, las cotas más altas ya están brillando en un impresionante blanco que no deja de tentarnos, día tras día, a perdernos en el paraíso de la nieve y las grandes alturas desconectadas del rutinario mundo. Muchas son las montañas esquiables en nuestro país y en el resto de Europa, pero ¿cuáles no deberías perderte?

Estaciones con snowparks, esquí de fondo, fueras de pista, rutas increíbles… son muchas las opciones que nos dan juego en la nieve. En este artículo recopilamos cinco lugares increíbles para sentir la nieve. Lugares que merece la pena visitar, algunos de los mejores que existen.

Grandvalira, Andorra

Considerada una de las mejores estaciones del mundo, Grandvalira es la opción a tener en cuenta si te consideras un rider en busca del más apasionante freestyle. Podrás desafiar y jugar con la gravedad en cualquiera de los cuatro grandes snowparks repartidos por toda la estación y probar todos los módulos y saltos que te ofrecen. Es una estación de sensaciones extremas, avanzadas y mucha diversión en el lado más lúdico de los deportes de nieve.

Por otra parte, es el dominio esquiable más grande de los Pirineos, con 205 Km y una cota mínima desde 1.710 msnm en las parte más baja hasta 2.640 msnm en la cota superior. Destacan la gran cantidad de pistas rojas y azules que tiene la estación, aunque sobre todo, las negras, que ascienden a 21 y que te indican claramente que estás ante una estación pensada para disfrutar al máximo el juego de la nieve. También ofrece una enorme variedad de opciones para hacer vida en après-ski, una de las que no debes perderte es quedarte al menos una noche en el impresionante Iglú Hotel:

Saalbach Hinterglemm, Austria

Saalbach es uno de los lugares que más juego ofrecen para esquiar. Si eres de los que prefiere sentir la aventura de perderte entre árboles, marcar nuevos itinerarios, esquiar rutas de nieve polvo completamente vírgen, ésta es tu estación. La aventura del fuera de pistas es la gran baza de Saalbach en Austria.

Una de las cosas más agradecidas de la estación es la atención al rider/skier. Tienen un telesilla de ocho plazas (lo normal suelen ser cuatro) con asientos calientes y una cubierta especial que puede bajarse en caso de mal tiempo durante el viaje desde la cabecera hasta el destino. Algo que se agradece muchísimo, puesto el tiempo en el telesilla es el único momento que tenemos para descansar y disfrutar de las vistas.

Sierra Nevada, España

Sierra Nevada es la estación de esquí más alta de España y uno de los puntos más altos de Europa. Con más de 102 Km esquiables, las posibilidades de disfrutar de la nieve son enormes. La cota superior de 3300 msnm hace que puedas esquiar casi muy cerca del pico del Veleta, el segundo punto más alto de Sierra Nevada. El hecho de estar a menos de 30 minutos del Mediterráneo hace que su nieve sea muy especial, conservando grandes propiedades incluso en primavera debido al particular clima, y permitiéndote apurar hasta el último día de la temporada gozando de unas condiciones de nieve bastante buenas.

Una de las cosas más sorprendentes de la estación, es que desde el punto esquiable más alto, en un día claro y soleado puedes ver el Mediterráneo sin problema e incluso la costa norte de África, una imagen increíble digna de ventanilla de avión, pero estás con los pies sobre nieve y a punto a hacer un descenso por la impresionante zona de La Laguna. En todo momento te encuentras rodeado de imágenes increíbles: Granada de fondo y la respetuosa mirada de unos imponentes montes blancos a tu alrededor.

Saas-Fee, Suiza

La perla de Los Alpes. Así es cómo se conoce en Suiza a la estación de Saas-Fee situada en el cantón de Valais. Cómo una de las estaciones más altas del mundo, Saas-Fee ofrece la posibilidad de esquiar en verano gracias a tener un glaciar en ella entre los 3.330 y 3.600 msnm, una sensación única completamente diferente del esquí de invierno tradicional que todos conocemos, principalmente por que te puedes permitir ir menos abrigado a disfrutar de la nieve y vivir el verano de una forma completamente atípica.

La temporada de verano empieza para ellos en Junio y acaba en Noviembre, enlazando directamente con la de invierno. Una de las cosas más agradecidas de la estación es que enlaza directamente con el precioso pueblo que hay anexo a ella, que además es prácticamente peatonal (sólo pueden circular vehículos eléctricos).

Geilo, Noruega

Una de las experiencias más bonitas que se pueden vivir esquiando es disfrutar de esa parte de la naturaleza que el hombre no ha podido manipular o transformar de alguna manera. Geilo es una estación perdida en Noruega con más de 200 Km de pistas de esquí de fondo. A unos 250 Km desde Oslo, la mejor forma de llegar es en un viaje en tren que dura más de siete horas y está considerado uno de los mejores trayectos ferroviarios del mundo por los increíbles paisajes que se pueden ver.

Geilo es una ciudad-estación de esquí rodeada tanto de frondosas y nevadas coníferas, como de lagos congelados llamativamente grandes y que puedes bordear esquiando. Es una gran opción si buscas la independencia absoluta con la montaña, alejado de grandes estaciones llenas de gente en las que apenas puedes esquiar y rodeado por un entorno natural que no puedes encontrar en cualquier estación. Una opción muy recomendada para sentir las maravillas de la naturaleza.