Los ángeles no tienen sexo. Una de tantas máximas que nos vendieron de pequeños y que a la larga nos hemos ido creyendo. Ni Papa Noel era rojo. Para eso está el marketing y algún listo. Si la realidad es aburrida mejor cambiarla. Si los ángeles no tienen sexo mejor organizar de forma anual el desfile de lencería más hortera y seguido de todo el mundo. El Madrid-Barça de las pasarelas.

Desde 1995 nadie se atreve a negar que los ángeles no tengan sexo. Tanto personal como fuera de las pasarelas. Desde que Victoria’s Secret comenzase a subir sobre las pasarelas a algunas de las modelos más atractivas y populares del momento el término ángel ha ido moviéndose como el dónut a la berlina (y de aquí al ERE).

Victoria’s Secret es la liga fantástica de cierto tipo de modelos. La Champions League soñada por tantos futboleros cansados de ver cómo algún grande se zampa de nuevo al Almería. El proyecto europeo cada vez más aparcado se contrapone con un casting que ha contado con Giselle Bündchen, Miranda Kerr, Adriana Lima, Heidi Klum, Alessandra Ambrosio, Stephanie Seymour, Tyra Banks, Heidi Klum, Doutzen Kroes, Laetitia Casta, Candice Swanepoel, Chanel Iman, Karlie Kloss… y podríamos seguir recordando nombres al tiempo que recordamos a quien nos dijo lo del sexo angelical.

16 años de los desfiles de Victoria’s Secret

Solo falta el de 1996 y 2004.

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