Experiencias por vivir

Los ‘boys’ de ‘Girls’

Alrededor de la serie ‘Girls‘ existen un montón de prejuicios injustificados. No sé quién fue el primero que la vendió como una nueva ‘Sexo en Nueva York’, pero el caso es que con ello consiguió echar para atrás a muchos posibles espectadores, hombres en su mayoría. ‘Girls’ se llama ‘Girls’, pero no es una serie solo para chicas, ni especialmente feminista –sus heroínas son antiheroínas–, ni con la carga de tópicos sobre las mujeres que lucía ‘Sexo en Nueva York’. Y en ella los personajes masculinos tienen casi tanta relevancia como los femeninos.

Sirvan las líneas siguientes como mi pequeño tributo a los “boys” de ‘Girls’: seres contradictorios, tullidos emocionalmente, en los que, por desgracia, apenas cuesta reconocerse. Personajes memorables que redefinen el concepto de galán romántico y que, desde luego, poco tienen que ver con el engominado, perfecto e imposible Mr. Big de Carrie Bradshaw. Ellos son de verdad, podrían ser tus amigos. O tú, vaya.

Adam, el visceral

Cuando lo conocimos, en los primeros capítulos de la serie, el artista Adam (brillantemente encarnado por Adam Driver) era un personaje poco sentimental, movido por azarosos impulsos primarios, con un halo de psicosis a su alrededor. Su relación con la protagonista Hannah (Lena Dunham) se basaba en sesiones de sexo extraño, sin componente romántico. En general, en la serie sabemos poco sobre los personajes que no sepa Hannah, y no fue hasta que ésta empezó a sincerarse ante Adam, a exigirle cosas, a quitarle una capa detrás de otra, que supimos del verdadero Adam.

El verdadero Adam es capaz del amor y del amor en su expresión más intensa. Es decir, es como ese novio que tiró a su novia de una montaña para animar la relación, hacer algo nuevo. Y como esa novia (vienen spoilers), Hannah también dejó a Adam, en su caso porque se asustó por la idea de vivir con él, de tener una vida estable que, en realidad, desea, como veremos más adelante. Así de contradictorios son los personajes de ‘Girls’. La segunda temporada ha observado a Adam despotricando alegremente de Hannah, cuando en realidad lo que desea más fervientemente (algunas frases, algunos actos lo delatan) es volver a tenerla cerca.

Frase memorable (a Hannah): “Pareces un adolescente mejicano. Mola”.

Ray, la voz de la razón

Como el resto, Ray (Alex Karpovsky) no se salva de la contradicción, pero es quizá la mente más relajada y reflexiva de todo el dramatis personae. Es el mayor (33 años, ya ven) y sirve de oráculo existencial para los demás. Aunque también preguntarse si sus consejos son fiables: es el mayor pero también el que menos trabajo tiene, el que vive en su coche hasta que empieza a salir con Shoshanna (Zosia Mamet, ingenua del grupo de ‘Girls’) y, en fin, el que llama constantemente a la acción pero no mueve un dedo.

“¡Simplemente dilo! ¡Soy un perdedor! Soy un gran jodido perdedor”, le dice a su novia en una escena memorable en la estación de Bedford Avenue. “Me estoy enamorando de ti”, le contesta ella. Y tiene su lógica: Ray es, pese a sus contradicciones, o quizá por ellas, un personaje encantador, cuya mera presencia destila inteligencia y saber observar. Así se entiende que Adam le abriera tan rápido sus sentimientos en el capítulo llamado, precisamente, “Boys” (un bromance en toda regla), y que casi todo el mundo le escuche cuando tiene algo que decir. Memorable su speech inspiracional para la algo indecisa Marnie (Allison Williams) en el reciente capítulo “It’s Back”: “Deja de ser cartógrafa y hazte exploradora”.

Frase memorable: “No me gustó cuando sodomizaste a mi mejor amigo en el corazón”.

Charlie, un bobo irresistible

La tercera estrella masculina de ‘Girls’ es Christopher Abbott, el más canónicamente bello de los actores de la serie. Por guapo le ha tocado el personaje menos querido de los tres: Charlie, ex novio de Marnie, un tipo sin excesiva personalidad que, por otro lado, es capaz de mostrarse como el más sobrado de los mortales. Si, con todos sus defectos, se puede querer a Adam y a Ray, con Charlie cuesta más, pero es divertido tenerle manía. 

Los guionistas de ‘Girls’ hacen todo lo posible por convertir a este bobo en un bobo irresistible, con líneas memorables de puro repelentes y giros argumentales tan contundentes como su transformación en joven millonario de Internet gracias a una aplicación creada bajo la inspiración de su ruptura con Marnie. El invento, Forbid, te impide llamar a los teléfonos que tu elijas (el de tu ex novia, esencialmente) y te cobra 10 dólares si rompes el compromiso que has tomado contigo mismo de no llamar. Pues sí, no lo vamos a negar, este chico es un poco genio. De hecho, Ray está un poco enamorado de él, como le dice a Marnie en la primera temporada.

Frase memorable: “Es un poco dramática. Necesita un período de enfriamiento de 24 horas”.

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Comentarios

  1. Comentario by Fernanda - julio 12, 2013 04:58 am

    Un gran tema para una gran serie, aunque al principio no me agradaba mucho, con cada capítulo me fue atrapando, hasta ahora Girls 2 no ha defraudado y creo que la serie es estupenda, cada personaje pude ser un reflejo de público que la ve.

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